Ondulaba la mar
Ondulaba la mar
sacando desde sus entrañas
el enfado, su fiereza
el descontento de los que están en tierra
olvidando que ella nos alimenta
para colmo la ensuciamos con nuestra torpeza
fruto del sin sentido y maleza
de los que se auto llaman humanos y no la respetan.
Pierde el azul de las olas
ocre, gris, aguas turbias
como esas mentes perversas
que piensan antes en llenar la cartera
que en cuidar el planeta
olvidando que este planeta Tierra
tiene todo para vivir en calma
prefiriendo el dolor, la sangre, la tristeza.
De asueto tiene algunos días
en que presenta su calma
mientras de sus enfados se relaja
mostrando con su azul su belleza
una vez que ha sacado su basura
la que le echamos por desidia
en nuestras playas las deja
decorando las costas con nuestras bajezas.
Allí, el sol y las estrellas se reflejan
hasta la luna en sus noches de luna llena
con su brillo y su hermosura
iluminando la mente de los poetas
los corazones de las parejas
hasta los lobos le aúllan la fiesta
esos días en que todo brilla tras la tormenta
la del mar, la de nuestra torpeza.
Toni Oliver
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