domingo, 17 de noviembre de 2019

Ni siquiera en mi te fijaste

Ni siquiera en mi te fijaste

Ni siquiera en mi te fijaste
tenía cara de payaso
el maquillaje se había corrido
de lo que estaba sudando
para que rieras un poquito conmigo.

Preferiste la belleza del cisne
las plumas del pavo real
coloridas como las que más
no viste las alas que llevaba
donde podíamos volar
más allá del universo
ni viste lo que te entregaba
mi alma, mi vida, mi cuerpo, mi tiempo
mi corazón hasta el último aliento
preferiste el pavoneo
de una belleza sin cerebro
ahí te pillo ahí te dejo.

No quisiste ver
como de una flor nace una historia
como el volar de una mariposa
se convierte en un viaje espacial
el olor a tierra mojada
un perfume de alta gama
sólo para quien lo sabe apreciar.

Mil pedazos, un corazón
esparcidos por los suelos
la gente pasa, les da una patada
los trozos cada vez más lejos...

Abrí las alas
aleteé al viento
emprendí un largo vuelos
donde no importen las plumas
sino el alma, el corazón, el tiempo
donde una mirada valga más que mil palabras
un silencio un libro entero.

Toni Oliver

Unos palitos de madera

Unos palitos de madera

Unos palitos de madera
sacados del frondoso árbol
cortado sin compasión
a corte de sierra.

Mil cosas salieron de si tronco
sillas, mesas, persianas, puertas
cubiertos a la antigua usanza
juegos de mesa, unos palillos.

Palitos, unas gomas
como cuando éramos niños
que cosas, volvemos al antaño
jugando sin más problemas.

Un chillido, rabia contenida
empieza la carrera, quieto
inmóvil más allá de los tiempos
primero las estrellas
luego, el placer de ver pasar el tiempo
despertándote en un momento
de un viaje frente al fuego.

De parlanchina a mudas palabras
una mirada enciclopédica
palitos juguetones
gomas guerreras
cómplices de las batallas
de silentes guerras.

Que decir de ese helado aire
que las orejas congelaba
el calor de los pequeños leños
en nada las calentaba
silente la lengua
mudos los labios
abiertos los ojos como un diccionario
contando a diestro y siniestro
lo que está pasando...

Siguen las llamas 
consumiendo los leños
en medio del monte
a cáñamo oliendo...

Toni Oliver