Nos dimos la mano
Nos dimos la mano
un fuerte abrazo
nos miramos a los ojos
el inexistente muro atravesamos.
Buscaba la puerta ausente
atravesamos la nada
la ilusión de un niño
del adulto, curiosidad innata.
Lúgubre el espacio
convirtiéndose en la “MANO”
esa que te guía hacia el vacío
entre entre interminables misterios.
Su esencia, Gran Cicerón
a lo largo del recorrido
la mujer en todo lo alto
en los cuadros, en los versos.
La luz se hizo
mil rayos al destello
no, ya no soy yo
soy ese niño.
En la pared del espacio infinito
esos dibujos de cuando niño
mofletes colorados
sonrisas de mil colores divinos.
Una manzana con su gran mordisco
si fue la serpiente, que mal gusto
la historia de Eva van contando
Adán todo perdido, la manzana en sus manos...
Mil historias en el escenario
entre paredes sin muros
esculturas flotando
la gravedad... ¿Quién de ello ha hablado?
Vuelta a la cruda realidad
ya nada es lo mismo
ni Alicia tras el espejo
ni yo mirándome extrañado
cual gato sorprendido.
Toni Oliver
Dedicado a Manu Navarro d'Garem, escritor, poeta, pintor, actor y escultor... Seguramente más cosas que no sé.
