sábado, 30 de octubre de 2021

La conseguí, al fin

La conseguí, al fin

La conseguí, al fin
esa muñeca sexual que tanto quería
llegó empaquetada como un tesoro
los vecinos mirando tras las cortinas.

La entré en la casa, con todo el cariño
al fin había llegado mi pedido
lo saqué del envoltorio
papel y plásticos sin retorno.

Un enorme manual
sus páginas en blanco
enchufa la máquina
espera que cargue un rato.

En mi corazón las pulsaciones en aumento
la impaciencia saltando por todos lados
al fin, al fin, la tengo
guapa, de pelo largo.

Rezaba la publicidad
hasta habla cuando está a tu lado
te hace compañía, es tu aliado
se enfada si no eres de su agrado...

Esto último no estaba en el manual
tampoco me lo habían recordado
ahora la he desenchufado
al interruptor le he dado.

Con descaro me ha mirado
un monumental cabreo ha pillado
al verme a mi, gordo y calvo
llevo horas y sigue recitando.

Hablarle he intentado
no me ha hecho ni puñetero caso
sigue despotricando, ahí la he dejado.
Me voy al bar a ver si como algo.

Toni Oliver

Construimos

Construimos

Construimos
con hormigón y hierro
donde antes era campo
de alimento y flores.

Ahora, un terreno yermo
donde no crece ni el aliento
somos como abejas en un encierro
acatando las órdenes de algo incierto.

No buscamos miel, sólo consumimos
no cultivamos alimento
desertizamos los campos
comemos lo que traemos de lejos.

Poco a poco, en silencio 
sin entradas, sin empleo
sin asimilarlo somos esclavos
pensando ser libres como el viento.

Trabajamos, no basta para alimentarnos
los bancos nos tienen endeudados
las deudas nos van consumiendo
no comemos hormigón armado.

Del campo, ni hablamos
esos seres extraños
que tiempo ha cambiaban su trabajo por el nuestro
así, con su esfuerzo y algo nuestro nos alimentamos.

Ahora, de otras fronteras va viniendo
hasta lo que nos parece más básico
aquí la fruta se está pudriendo
el resto para abono y pasto.

Adónde vamos por este camino
sin tiempo para respirar ni calmar nuestros ánimos
de la paz del alma nos olvidamos
locos, ya desesperados, nos vamos consumiendo.

Allá en lo alto, los que mandan de facto
burlándose de nuestro esfuerzo
cuando nosotros los hacemos millonarios
sin enterarnos, vejados y humillados.

Toni Oliver