viernes, 11 de febrero de 2022

Apareció como por arte de magia

Apareció como por arte de magia

Apareció como por arte de magia,
en las iluminadas calles, la niebla
luces en doquier difuminadas
cortándola con pico y pala
paso a paso para avanzar
pues estirando el brazo
no se distingue la punta de los dedos
sólo esa humedad blanca
que se pega en la ropa
pareciendo una gran nevada
que uno se lleva pegada.

Cala el frío en los huesos
tiritando los dientes
como un percutor tartamudo
acompañado de los pasos firmes
un fuerte taconeo marcando el paso
incluso las prisas entre el miedo
por si aparece el hombre del saco
ahora ya llamados asesinos en serie
violadores de tres al cuarto
la inseguridad inculcada en el cerebro
mientras la respiración se va acelerando.

Unos niños, frente a sus portales
expirando el aliento antes respirado
viendo que a su salida genera más niebla
como un día frío o helado
chilla la madre o el padre, o ambos
¡Niños, “padentro”, estáis todo mojados!
Refunfuñeos de los renacuajos
con lo bien que se lo estaban pasando
ignorando los miedos de los adultos...
Con lo que estaban disfrutando.

Una explosión, un disparo
un reventón de algún neumático
misterio, nadie sabe lo que ha pasado
cada uno desde su casa
hablando con el vecino por la ventana
no, no se ven las caras, sólo voces
todos especulando sobre el suceso
nadie hacia afuera da un paso
ya veremos mañana que dice el periódico
que para salir no está el patio...

Toni Oliver

Te di un beso

Te di un beso

Te di un beso
tu nombre no diré
bien sabes que a ti me refiero.

Un beso de esos apasionados
donde ya sin querer cierras los ojos
aprietas con brazos y manos.

De esos donde las lenguas
juegan como niños
explorando el universo.

El corazón palpita a destajo
no quieres que se acabe
no importa el tiempo.

Donde parece que se acaba
todo empieza de nuevo
con más fuerza si cabe.

Abrazas, aprietas
agarras donde las manos alcanzan
retuerces el cuelo de uno y otro lado.

Mientras, se para el mundo
se detiene el universo
sólo dos pares de labios.

Solitarios en medio del desierto
o entre el mar alborotado
en silencio, hablan los cuerpos.

Cuando vuelve a la normalidad
te preguntas. ¿Cuál es esa?
De eso ya nada encuentras.

Por dentro te preguntas.
¿Qué que pasado, nada entiendo?
Sonríes, de nada me arrepiento...

Toni Oliver