Mientras
Mientras
me hundía en el lodazal
de mis incertezas, alegrías
de mis adentros, penas
alargando mi brazo
a través del lienzo de mi vida
buscando una mano amiga
que me arrancara de la amargura
de la feroz tormenta
viento huracanado
truenos, rayos
allá a lo lejos, muy lejano
una mano, decíase amiga
movimientos hacía
como si se acercara a la mía
al final sólo saludaba
mis gritos no oía.
Rebosante el lienzo
del barro de mi lodozal
rompió la tela embadurnada
como pintura,
tanto barro no aguantaba
cayendo sobre la arena la pintura
tras la tormenta, como semilla
a destiempo enterrada
bajo el sol, crecía y crecía
hermoso vergel parecía
el bosque por los lados
como defensa del tesoro escondido
ese que estaba en mis entrañas
que yo mismo enterraba
bajo el lodo de la farsa
aparentando lo que nada era
como aire en botella dorada
de diamantes adornada.
De nuevo me visitó la vida
la que yo mismo enterraba
sin saber que era yo quien la pisoteaba
bajo mis pies machacaba
como si fuera día de trilla
siendo la era tierra mojada.
Toni Oliver
