Me salpicó la lluvia
Me salpicó la lluvia
ahora suave caía
a su paso, la piel acariciaba
era limpia, fría, fría.
Tú, también ahí estabas
le ponías la cara
para que te la acariciara
tiempo ha que la lluvia no aparecía.
Nos miramos, sonreías
al igual que mis labios lo hacían
cuatro ojos se miraban
hablando de por vida.
De algún lado sonaba la música
como por arte de magia ahí estaba
el ritmo nuestros cuerpos movía
bajo el agua que nos mojaba.
Pegada al cuerpo la ropa
todo lo marcaba
aunque nada se veía
todo se notaba.
Desconectamos de la música que sonaba
tornábamos a nuestra infancia
aquellos saltos en los charcos que salpicaban
que tanto nos gustaban.
Ahora ya sin broncas en casa
que si los zapatos, que si la ropa
de todo eso ya nada de nada
dos críos asalvajados en el agua.
Con nuestras risas y sonrisas
esa ropa al cuerpo pegada
me recordó cuanto te deseaba
y lo que mis labios callaban...
Toni Oliver
