Humeaban las hojas
Humeaban las hojas
entre las infernales llamas
rompiendo el silencio, crujían
en el pequeño claro del bosque
entre la noche oscura
amenizada por la tibia luz de la luna
y el de las propias llamas.
Danzaban las bellas damas
ininteligibles sus cánticos
giros y giros a la hoguera
mientras se desnudaban
soltando la parte física de su alma
entregándole a la propia naturaleza
dando por todo las gracias.
A lo lejos asoman luces
antorchas parpadeantes
pasos a toda prisa
a la hoguera acercándose
sólo encontraron fuego
ellas ya no estaban
sólo harapos por los suelos.
Maldicieron los malditos
la mala suerte de su esfuerzo
hasta la cruz ardió en el fuego
por no ayudarles en su juego
el de la sangre y abuso
por la mano del que lleva anillo
pidiendo a todos su beso.
Toni Oliver
