Llegó de improviso
Llegó de improviso
tras virus y más virus
la viruela de los simios
se transmutaron poco a poco
a sus orígenes los humanos
si antes ya cantaban balbuceando
ahora hablan con inentendibles sonidos
todos ellos muy extraños.
Apareció un espejo
en un campo de plataneros
se miraban extrañados
ya no quedaban humanos
sólo simios y más simios
así el planeta se convirtió
en el planeta de los simios...
Me recuerda al cine de antaño.
¡Oh, los grandes ricos!
Reminiscencias en su cerebro
de aquello que llamaban dinero
ahora ya olvidado
quieren volver a tener el mando
el control del ganado
pero no responden sus cuerpos
antes el dinero los tenía maquillados.
Ahora, cizaña van sembrando
en todos los monos que van encontrando
les encanta ver somo nos peleamos
sabiendo que nos tienen manipulados
mientras más cizaña van añadiendo
proclamándose salvadores del mundo
siendo puros lobos hambrientos
sus fauces están babeando...
Toni Oliver
