miércoles, 23 de julio de 2014

Surcaré los mares

Surcaré los mares

Surcaré los mares hacia el infierno
ya que en el cielo solo los loares
mas no las verdades
que al alma la hacen falta
para vivir en todos lares.

Las tormentas que se interpongan
cruzaré con maestría
de viejo marino curtido
a base de palos y aprendizares.

Surcaré los mares hacia el infierno
en el que te encontraré sin pesares
sin obligados cantares de amor y paz
que por la espalda
con la guadaña la vida hace sus segares.

En el calor del infierno pasión y energía
pasión para vivir la vida
energía para aguantar el ritmo de vida
ese ritmo que con calma y alegría
recorre cada segundo de nuestra vida.

No confundas el infierno,
ese que nos han vendido
ese de fuego y diablos
cornudos y desalmados.

Ese infierno es esa vida
esa en la que estamos cada día
esa que cada mañana
amanece y oscurece cada día.

No te engañes por las promesas
de futuros en mundos extraños
mundos mejores sin retorno
a sabiendas de que quien promete
sabe que vuelta no tienes
y reclamar no puedes.

Vive los placeres de este infierno
que al cielo te llevan a veces
ese que vive en tu mente
que en nada se parece
al de cánticos, rosarios y pálidas mentes.

Te prometen los cuervos
viajes por el cielo
cuando a ellos te elevan
con los pedazos de tu cuerpo
mientras se los comen
al tiempo que te mandan al infierno.

Por vanas promesas
de vivir no dejes
que si no vives
las promesas no vieres.

Surcaré los mares hacia el infierno
aunque lo que encuentre sea incierto
mas viviré la vida en todo momento
le pese a quien me prometa el cielo.

Toni Oliver