Arde el deseo

Arde el deseo

Arde el deseo
la piel, la mente, el cuerpo
tiemblan las manos, los labios
la tentación ante mis ojos
incertidumbre, antojo
miedo a lo desconocido
se intenta el control
para no caer en la tentación
todo se esfuma, gana la pasión
como una gran explosión
se rompen los trapos
convirtiéndolos en harapos
se funden los labios contra labios
los brazos... Son abrazos
piel contra piel, juntos los cuerpos
estrellas de colores, el cielo
un big bang, el universo
respiración en calma, descanso
cuerpos abrazados, mente en blanco...
Poco a poco, de nuevo, arde el deseo...

Toni Oliver

Calienta el sol

Calienta el sol

Calienta el sol sobre la playa
con su va y ven, ahí, las olas
en mis manos un libro con sus hojas
letras negras en ellas incrustadas.

En mis labios una sonrisa
una pareja enamorada
al pasar de la hoja
empieza sus andanzas.

Cabalgan por la verde pradera
sobre un unicornio blanco ella montada
vestido largo, blanco, cortes a los lados, de seda
él, sobre uno negro, en su mano la espada.

Con delicadeza, giro la página
A lo lejos un velero, hacia la playa
en pequeñas barcas, los piratas
trabuco en mano, con sus balas.

Vestidos con sus harapos, sus barbas
rabia y hambre de tres semanas
como salvajes desembarcan
unos disparos se escuchan.

Retruenan entre las montañas
desaparecen los pájaros en bandada
hacia los montes corren las cabras
delante sus ojos no queda nada.

Cierro el libro, en mis manos sus tapas
un descansos entre esas batallas
en el horizonte el rojo sol en su puesta
las nubes color naranja...

Toni Oliver