lunes, 17 de octubre de 2016

Susanita

Susanita

Susanita tiene un ratón
su cerebro le ha comido
se cree ser la emperatriz
la grande del reino.

Ni cuenta se ha dado
del follón que ha formado
sus aires de grandeza la han liado
Felipito grillo la está guiando.

La carcoma sus sillones va comiendo
piensan que las gaviotas se la irán tragando
manteniendo así sus poltronas
 por los infinitos tiempos.

Grandes tormentas
relámpagos y truenos
falsa sonrisa el camino alumbrando
rumbo a un oscuro agujero
que todo su reino se irá tragando.

Susanita tiene un ratón
sin cerebro le ha dejado
le está ganado la ambición
le importa un pimiento
lo hasta ahora ganado.

Si quien puso nombre a tu reino
la cabeza levantara
o se moría o todas las cabezas cortaba
no soportaría el hundimiento
de su estimado reino
ganado con sudor, sangre y lágrimas.

Toni Oliver

El niño y el colúmpio

El niño y el columpio

¡Mamá, mamá, deja que me columpie!
¡No, que te vas a matar!
¡pero mamá, déjame ir, por favor!
¡Te he dicho que no, basta!

Saltan las lágrimas del niño
regando la arena del parque
sentado, la cabeza entre las piernas...
Su cabeza al columpio llega.

Sube, baja, sube
vuela por los universos
es un avión, es un cohete
es un barco en la tormenta.

Contra el enemigo pirata ataca
con cañones y espadas
¡Al abordaje!
Chilla con todo el alma.

En pirata se convierte 
sin normas ni nada
se rebela en sus adentros
se inhibe de la nada.

El es todo, sin normas ni reglas
ni dictadores que dicten su conciencia
surca los mares, vuela por los aires
nuevas tierras, nuevos mundos
aventuras imparables
paraísos interminables.

Sube y baja el velero
en la tormenta y la mar brava
pirata rey de los mares
siente el poder de quien con la mar baila.

Le cantan las sirenas a su paso
incesantes melodías por si acaso
se siente bello y amado
en su columpio sube, baja, sube...

¡Niño, baja!

Toni Oliver