Apareció la fantasía
Apareció la fantasía
entre nebulosas
bellezas divinas
entre la mental neblina
viaje a las estrellas
entre el transporte de la nada
ni aparente gravedad
que a la Tierra nos agarra.
Cuatro luceros brillan
entre los rayos de la mañana
los ojos hacen chiribitas
no se han quitado las legañas
pegados los párpados, las pupilas
permanecen entre las sábanas
escaqueándose de la vida
el cuerpo no se levanta.
Pero firmes, a la madrugada
palo de bandera izada
ondeante ante la brisa imaginaria
valiente guerrero a punto de la batalla
saltan por los aires las mantas
espada en mano, listo para la lucha
intenta separar las pestañas
intentando imaginar a esos luceros del alba.
Ciego de nuevo, la luz de la ventana
las cortinas raídas
la esperanza violada
entre el verde de la pradera
olvidada, abandonada
quizás, el rocío parezcan lágrimas
deslizándose por las hojas
por los pétalos de las rosas
dándole brillo a las amapolas
ellas, frágiles, delicadas.
Toni Oliver
