sábado, 28 de noviembre de 2020

Dos almas perdidas

Dos almas perdidas

Dos almas perdidas
en el túnel del tiempo
equidistantes al infinito
jugando como niños
con las estrellas del cielo.

De universo a universo
mandando mensajes al vacío
llegando a destiempo
a este mundo finito
una sonrisa aflora en los labios.

Esperando el momento
del turno del juego
un ajedrez sin tablero
las fichas, el deseo
las reglas, el movimiento.

Dos almas perdidas
a veces en vías de acero
mundos paralelos
salvo accidente no hay encuentro 
sólo los saludos a lo lejos.

Cierras los ojos
un mundo de ilusión
latiendo el corazón
de críos enamorados
en un mundo incomprendido.

Como dos locos
en un mundo de cuerdos
nos llaman enfermos
porque no obedecemos
las reglas de lo mandado.

Toni Oliver

Tras la tormenta

Tras la tormenta

Tras la tormenta
entre cielos nublados y truenos
tenebrosas las aguas
iluminadas por los relámpagos
de mil ramales enfurecidos
sopló con fuerza el viento.


En el cielo un claro
del sol, su luz un rayo
de entre las aguas una sirena
vestida de sedas rojas
levantadas por los aires por el viento
formando un espectáculo 
luz, color y sentimientos.

El ondeante rojo
bajo la amenaza del negro
acechaba por los cielos de nuevo
poca visión desde la lejanía
sólo formas bien formadas
estatua viviente de mármol
los ojos que miran hipnotizados.

Arreció la tormenta
sedas mojadas
cruel el viento
rayos, truenos
hipnótico sueño
en el mar ya no te veo.

Ruido en los cristales
enorme golpeteo
el granizo rebota en ellos
me despierto
noche fría de invierno
afuera fuegos de artificio
parpadeo de los sueños.

Toni Oliver