sábado, 28 de abril de 2018

Dígame señorita

Dígame señorita

Dígame señorita
cada día por aquí la veo
enfrente,  al lado
en el suelo, en el techo
por todos lados
de ti envuelto.

Miles de años han pasado
la sigo viendo, sintiendo
cada día de ti enamorado
poco importa si truena o está lloviendo
si sale el sol o si se está poniendo
si amanezco a tu lado
o si bajo la luna estamos paseando
sintiendo el frío con las estrellas por techo.

Dígame señorita
que tiene tu mente, tu cuerpo
que con el pasar de los años
el decaer de nuestros cuerpos
esas arrugas que decoran nuestros pensamientos
porqué aún así, la sigo queriendo
como aquel día que chocaron nuestros sentimientos
como dos trenes de vapor
a toda prisa corriendo
quedando incrustados el uno con el otro
para vivir juntos el pasar de los tiempos.

Dígame señorita
ahora que casi ya ni le veo
mis ojos la vista hace tiempo perdieron
porque aún la siento
con esa pasión de los primeros momentos
con esa misma pasión de los ardientes aceros
al rojo vivo, ardiendo.

Acaso no pesares no hubo
baches en los que caímos desconcertados
grandes muros que al final hemos saltado
o aquel acantilado que al vacío nos arrojamos
para darle sentido a los caminos andados,
aún así siento que seguimos enamorados
como los tortolitos, seguimos cantando.

Toni Oliver