domingo, 27 de agosto de 2023

¿Vergüenza de qué?

¿Vergüenza, de qué?

Acaso tenemos que hacer caso
de avergonzarnos de hacer lo que nos gusta
sin dañar a nadie ni meternos en vidas ajenas...

Si lo tienes todo
la belleza, la vida
acaso tenemos que ser feos para disfrutarla.

Que complicados somos
todo lo que es o da placer
nos lo prohíben de una forma u otra.

Y sí, se van los ojos
al ver la alegría ajena
pero muchos no la soportan.

Acaso es feo un árbol desnudo
una playa sin gente
una obra de arte al natural.

Acaso no somos obra de arte
que hay de malo en presentarnos desnudos...
Vivimos de apariencias, engaño absurdo.

Acaso es malo ese arte de seducir
sin mostrar nada, imaginando todo
la mente trabaja a destajo.

A destajo montando una ilusión
fabricando esa mente lo que al alcance no tiene
ilusión a gusto del consumidor.

Luego viene el engaño, la desilusión
cuando lo imaginado no coincide con la realidad
falsas expectativas, mala jugada de tu cerebro.

Cambiemos “vergüenza”
por ver, enseñar todo, sin trampa
lo que se ve es  lo que hay, no pidas más.

Tampoco te creas que lo que ves es tuyo
para eso lo hay que trabajar, respetar
no robar en plan pirata.

Toni Oliver

El paraíso buscaba

El paraíso buscaba

El paraíso buscaba
todo el mundo me lo vendía
un alto precio me pedían
ninguno me satisfacía.

Busqué sobre la faz de la tierra
también en sus entrañas
nada, nada encontraba
sólo copias baratas y caras.

Mil encrucijadas
todas ellas erradas
todas se auto nombraban 
“el paraíso que imaginas”.

De filibustero esas palabras
ninguna de ellas la verdad en si traía
sólo un mundo de fantasía
a la venta, todo por la pasta.

Cerré los ojos un día
olvidé lo que buscaba
las ilusiones perdidas
dejé que la intuición me llevara.

Me llevó por pedregosas rutas
de baches y altas montañas
me senté en una de ellas
me quité la venda con calma.

Los ojos me dolían
tanta luz no soportaban
poco a poco se acostumbraban
al darme cuenta de la gran calma.

Lo tenía todo y nada
el corazón latía con alegría
sin pasar por la taquilla
de la cartera humana.

Aunque sí pasé por la taquilla
la de sentir la vida
de vivirla sin esperar nada
sin nada más que disfrutarla.

Toni Oliver

Se oscureció

Se oscureció

Se oscureció
un abrir y cerrar de ojos
de la luz a la oscuridad
sin pasar por la penumbra.

Del cielo irrumpieron
los rayos y truenos
la lluvia en doquier
sin importar de donde venga el viento.

Ni del norte, ni del sur
ni del este o del oeste
entra por todos lados
en todos omnipresente.

Los truenos suenan
como una gran orquesta
de tambores afónicos
con fuerza y destreza.

Por los suelos
pequeños ríos de agua 
recorren las calles
limpiándolas del polvo acumulado.

Tras ese verano ardiente
caluroso para más datos
humedad gradiente 
agotador, con sueño siempre.

Se agradece el regalo
esa agua, ese frescor
ese aire con pretricor
esa lluvia que hace falta.

Quizás, ahí lo malo
irrumpa con destrozos
por algún lugar aislado
confío en que no llegue ese malo.

Toni Oliver