miércoles, 26 de enero de 2022

Breve historia

Breve historia

Breve historia
Había alimentos
para ricos y para pobres
a los ricos empezó a gustarles la comida de los pobres
los pobres no podían comprar la de los ricos
aumentó la demanda de la comida de los pobres
los precios subieron y subieron
los ricos ahora tenían la comida
la de los ricos y la de los pobres
estos últimos ya sin comida
pues sus sueldos ya no llegaban
no alcanzaban para comprar comida alguna
ni un simple pan que era casi lo único que les quedaba.

Ahí lo dejo, pensad señores, pensad...
que a pobres ya vamos más de la mitad
algunos pensando ser millonarios
sin que les alcance ni para el agua del baño
eso si les llega para tener ese habitáculo
pues lo más normal es que no tengas ya nada
ni una pobre tienda de campaña
que al final lo mismo da
pues no te la dejan instalar
dicen que es acampar
y en tierra de la piel de toro
es delito si no tienes que y para pagar.

Toni Oliver

¿Qué dirían las estrellas?

¿Qué dirían las estrellas?

¿Qué dirían las estrellas?
Si nos vieran mirándolas
intentando descifrar sus entrañas
o viendo como les atribuimos la magia...

Mil historias, leyendas
astrología a la carta
influyen en nuestras vidas
y nosotros al cielo la mirada.

¿Sabrán qué existe la vida humana?
Más bien lo que sabrán es que no somos nada
un grano de arena es una inmensidad
si lo comparamos con esa humana vida.

Nos creemos dioses con nuestra sabiduría
cuando en realidad no sabemos nada de nada
suponemos más bien, el tiempo nos lo cambia
y lo de dioses, se ríen a carcajadas.

Si mirásemos los destellos, sus risas
nosotros las vemos bellas
ellas se ríen en nuestra cara
al ver nuestra idiosincrasia.

Si pudiéramos escucharlas
como chafardean de nuestras animaladas
sus risas al ver nuestra “supremacía” inventada 
lo grandes que somos sin ser absolutamente “nada”.

¿Qué dirán las estrellas?
Si nuestras bocas estuvieran calladas
sin alardear de nuestras burradas
ni de nuestras guerras absurdas.

A veces se ponen tiernas
al ver nuestras historias
esas en que amamos o nos aman
pero tan poco duran, rápido se secan las lágrimas.

Toni Oliver

El alquimista

El alquimista

Va el alquimista
por senderos y veredas
calles, callejuelas
sótanos y esquinas.

Busca corazones
rojos, ardientes
con pasión existente
de la que brota cuando todo es indiferente.

No quiere los fríos de hielo
ni los duros como piedras
los que a todo miran con cara de asco
ni esos que por nada se estremecen.

A esos les llegará su turno
para un experimento diferente 
el de llenarlos de calor
a ablandarlos si se lo merecen.

Busca a los primeros
para jugar con la alquimia
la de las flechas de Cupido
y mejorar las parejas.

Aunque parezca raro
Cupido busca atar
el alquimista los quiere soltar
para un viaje en paralelo.

Juntos, no atados
para que tengan un hermoso vuelo
duren el máximo tiempo
libres como el viento.

No hay propiedad que valga
sino la voluntad de juntar el vuelo
yendo a un mismo destino
aunque, como todo, sea incierto.

Toni Oliver

Me perdí

Me perdí

Me perdí entre esa gran maraña
la de tu pelo que ondulaba
simulando a las nubes mientras volaban
formando ellas la silueta de tu cara.

Miré al azul cielo
entre él y la Tierra tu reflejo
los duendes contigo hacían un juego
desenredar ese liado pelo.

Entre luminiscencias
como su fuera un ejército de luciérnagas
te encarnaste en un Hada
en tus manos tu varita mágica.

Mis ojos viendo chiribitas
incrédulos entre la magia
casi con los dedos te tocaba
hasta llegó un momento que volaba.

Sopló el viento
duro, sin compasión
me vi caer al vacío
sin más, sin contemplación. 

Mientras caía
volví al cielo a mirar
sólo azul cielo, nada ya quedaba
miré hacia abajo, el azul mar.

Toni Oliver