Te viste

Te viste

Te viste abrazada sobre la calavera de tu cuerpo, la acariciabas, besabas, incluso llorabas al recordar  que tanto por la muerte te preocupabas que de vivir te habías olvidado.

Ahora, tu vida perdida, con el abrazo a esa muerte que tanto te preocupó te vas dando cuenta de lo absurdo de preocuparte por algo sin remedio, te creaste miedo, una vida paralela después de la muerte, sin vivir la vida, esa cosa tan simple que sólo te pide que la vivas cada segundo sin que  la preocupación por el siguiente no te quite la vida de ese instante presente.

Absurdo pensar más allá de lo que estás viviendo, la mente no siente, no se preocupa por eso que vives y eso lo pierdes, no hay vuelta atrás, ni tampoco al futuro, todo lo que hay es ese momento.

Pero claro, tenemos la manía de querer controlarlo todo, de complicarnos la vida por lo inexistente y cuando nos damos cuenta hemos perdido un presente que ya es pasado y para nosotros un momento no disfrutado porque nuestra mente estaba en otro tiempo intentando controlarlo.

Vivamos el momento, no lo que nos imaginamos, ni las expectativas que nos creamos, dejemos que nos fluya la vida con toda su esencia sin que tengamos que preocuparnos por muestra paciencia  ni por la impropia impaciencia.

Nuestra mente nos juega malas pasadas, nos hace perder la vida que tenemos por pensar en otras que ya pasaron o las inexistentes de un futuro que nunca veremos, todo lo que llegue será en presente.

Soltemos el control, vivamos, sintamos, amemos, sin más.

Toni Oliver