Se me ocurrió pintarte
Se me ocurrió pintarte
sobre un papel en blanco
los pinceles desaparecieron
lo intenté con las manos.
Acariciaba tus mejillas
al tiempo que lo hacía con tu pelo
con los dedos peinándolo
a cada paso mojaba los dedos en el tintero.
Se me derramó éste
por la mitad del papel se esparció
lo recoloqué formando un vestido
como de boda, de esos largos.
Reforcé las sombras
dejando tu pecho al descubierto
al igual que tu pelo
que con la brisa acariciaba lo estaba acariciando.
Con mis dedos manchados
llené los espacios de besos
acercando los labios
pincel para dejarlos bien marcados.
En el primero, casi ni te enteraste
en el segundo saliste del papel
fuerte, muy fuerte a mi te abrazaste
tu pecho descubierto sobre el mío.
Que momento más tierno
apasionado al tiempo
de una mancha un sueño
tus labios, los míos...
Ojos cerrados
dejando que sea el alma la que siente
el corazón quien dirige
y el cerebro que se tapa los ojos para no vernos.
La oscuridad se hizo
mientras los brazos abrazados
juguetones los dedos
por todos lados van pasando...
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