Me robó un beso
Me robó un beso
se pegó a los labios
los suyos y los míos
se quedaron pegados
como el pegamento
olvidando la intención
de besar y salir corriendo
pensando que sería rechazado.
Se olvidó
de que a los besos no desprecio
más si son de pasión
también si son con desenfreno
aunque diga nada entiendo
sigo el juego desde el corazón
a él le gustan esos intentos
cual colegial en el primer enamoramiento.
No conocía mis brazos
la atrape como un pulpo
son seis brazos menos
sintiendo como me atrapaban los suyos
oprimían pecho contra pecho
se entrecortaba la respiración
quería mirarle a los ojos
pero los párpados estaban pegados.
Al abrirlos
después de un buen rato
estaban atrapados con el sentimiento
me hallé con los suyos
trampa de fuego
hipnótico
me quedé sin parpadeo
más ya no cuento.
No tengo tiempo.
Toni Oliver
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