Me trajo el viento
Me trajo el viento
en un mundo de soledades
pensamientos interminables
devaneos de realidades
ese perfume de tu piel
que guardaba en mis recuerdos.
Loco, busqué en doquier
hasta en lo más recónditos recovecos
no te encontré, sólo era un recuerdo
el perfume seguía llegando con el viento
mi locura alimentando
miro al cielo, vuelo, vuelo.
Como el águila
oteo el suelo
en busca de esa locura
ese perfume que siento
calvándose en mi cerebro
profundas raíces en el tiempo.
En el silbar del viento
entre las ramas del bosque
asimilo tu voz
música celestial del infierno
removiendo mis recuerdos
amasando el pan de los sentimientos
para que quede tierno
en ese sacar del horno
el bullir del viento
la falsa realidad de mis inventos
paranoias mentales
o, quizás, realidades de cuento.
Ahí sigue tu perfume
paseando por el aire
incrustado en mis labios
para regocijo o tormento.
Toni Oliver
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