La comuna de viejos
La comuna de viejos
no asilo de ancianos
en la comuna viven a gusto
en el asilo cuasi encerrados.
Y lo de viejos...
son muchos años acumulados
el cuerpo algo ya cascado
pero de mente... Niños alocados.
Al alba, entiéndase cuando el sol ya alto
mirándose las canas, si les han quedado
suena la música, se van moviendo
ni se enteran, están bailando.
En el fondo, dos viejos con bastón
en sus manos un bastón
en la pantalla un duelo
a esgrima sin dolor.
Se levantan al son
de la música que está sonando
sus bastones van desenvainando
se enfrentan como dos alocados.
Se escuchan los golpes de los maderos
como cuando corrían ante ellos
toda la comuna se ha girado
todos aplaudiendo.
Se para todo por un momento
no se han nombrado los padrinos
van a por dos vasos de zumo
a los portadores padrinos han nombrado.
Ahora con su protocolo
los dos viejos bien colocados
con las normas los padrinos
empieza el estruendo.
La viejecita se ha despertado
a golpes de bastón
no a ella, no, sino de los que se han retado
se levanta del sillón chillando.
Silencio, sólo sus pasos
el sólo de su bastón
frente a ellos levanta el palo
el dueto en terceto se ha tornado.
Piden los retados
otro bastón para el equilibrio
no están los cuerpos para ir a lo tonto
la seguridad es un principio.
La masa de la comuna chillando
vítores a cada uno de ellos
suena la campana a lo lejos
la comida en el comedor han montado.
Se saludan los del reto
reverencia y bastón
que el hambre va primando
lo demás para otro momento dado.
Se escuchan los cubiertos
con los platos chocando
las dentaduras se van colocando
no sea que no puedan estar mordiendo.
Al filete o al de al lado
que los mordiscos son cariños
eso dicen algunos raros...
Es la siesta... Todos roncando.
Toni Oliver
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