En la cima de la montaña
En la cima de la montaña
un columpio ha aparecido
colgado de un hermoso pino.
El mar ahí al fondo
azul como el mismo cielo
combinado con el negro de tus ojos.
Pudo más la niña
que el racional adulto
se subió al columpio.
Poco a poco emprendió el vuelo
hacia las alturas, cual pájaro
lo racional se evaporó.
Las hadas volvieron
también los nomos
o el invisible amigo.
Entre el voy y el vengo
el vaivén de los sentimientos
el sentir de un ardiente corazón.
En cada vaivén el pasado
el presente, el futuro
entre ellos la estela de tu pelo.
Ese azabache negro
oscuridad de brillo
bajo la luna, bajo el sol.
Brillas bajo el radiante sol
su luz devolviendo
añadiendo la tuya al desconcierto.
Bella con descaro
sonrisa hasta el esperpento
que te destroza por dentro.
¡Ah¡ El columpio
su vaivén y su vuelo
sueñas y vives los sueños.
Toni Oliver
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