Tras la lluvia

Tras la lluvia

Tras la lluvia

hermoso arco iris de colores

entre unos y otros fui escalando

hasta la cima del arco.

Desde lo alto

me observaba otro arco gemelo

tanto o más bello

tierra mojada ahí a lo bajo.

Como niño travieso

bajé sentado y rápido

un hermoso tobogán improvisado

se mezclaban los colores a mi paso.

Con ellos una gran explosión

formándose palmeras, castillos

colores muy vivos

de ilusión y alegría cargados.

Sobre las palmeras bellos pájaros

como música sus trillos

apareció un mundo mágico

donde sentirse vivo.

Trepé de nuevo

por los colores del arco gemelo

al ir a la cima llegando

se convirtió en tobogán inverso.

De repente... El ascenso

elevándome a los cielos

un viaje infinito

del que no quedan recuerdos.

Pero sí, esa satisfacción

de vivir cada momento

sintiendo esa vida con pasión

como la lluvia cuando cae sin miedo.

Con esa misma bajé del cielo

como dije, sin recuerdos

un maravilloso sueño

esperando con anhelo otro nuevo.

Toni Oliver