Simplemente la vida
Simplemente la vida
Correteando por el valle
por el campo o por el lago
solo o acompañado
danzando la danza de “algo”
con la música que me he inventado.
Me siento seguro, como en un castillo
tras sus grandes muros estoy asegurado
no me importan los asaltos
estoy de todo mal resguardado.
Me duermo, un sueño, una pesadilla
escalera circular al cielo, infinita.
Sobre las nubes me veo colgando de un hilo
haciendo malabares para irme sujetando
más abajo, nada, todo infinito
poco a poco voy bajando
cristales rotos por todos lados
imposible tocar el suelo con los pies descalzos.
Se escucha el ruido de las ruedas
sobre los raíles de acero
el tren entre montañas y valles
parando en estaciones dispares
gente subiendo y bajando
despedidas sin próximo encuentro.
De entre el rebaño
la oveja negra soy
me llevo todos los palos
hasta que la valla salto
abandonando ese mundo malo
buscando horizontes todavía no encontrados.
Entre mi soledad días de gloria
al encontrarme a mi mismo
mirándome al espejo del río
iluminado por un rayo de sol
mostrándome el camino
de mi yo interior.
También en esa soledad
camino a todos lados
a la vez que a ninguno
escaleras oscuras y resbaladizas
ciénagas y arenas movedizas
calor, frío, fuego del infierno.
Sentado bajo un árbol
en medio de un solitario prado
el trino de los pájaros
concierto en un gran teatro
en el cielo los danzantes
bailarines incesantes.
A veces en el camino de la nada
entre la oscuridad mi lámpara mágica
que en ese mundo negro y oscuro
me ilumina mágicos caminos
donde caminar con tiento
hasta salir del encierro.
En el camino unos ojos
los miro, me enamoro
no entiendo nada, voy como loco
pierdo la cabeza, no la encuentro
poco importa, no la busco
me encanta ese momento.
En mi mano una rosa
carnaval de colores
viaje en la noria
en la feria luces de colores
caballito de cartón, cabalga
sube y baja, sube y baja.
Toni Oliver
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