Cuando el destino
Cuando el destino
las puertas cerró a cal y canto
abriste las puertas del mismo universo
ese mundo secreto
el de tus adentros.
Se llega sólo al tocar fondo
abandonando la lucha por algo
abriendo el universo del todo
con sólo cerrar los ojos
viajando más allá del propio engaño.
En ese viaje hacia el mundo oscuro
curiosamente se ve mejor la luz de ese todo
siempre esa luz la has tenido dentro
pero no se ve con los ojos abiertos
si abiertos están te deslumbran los brillos.
Ahora la realidad estás viendo
esa tuya que sin querer te has ocultado
necesitabas rendirte tras el cansancio
resucitando de entre los rescoldos
las llamas del puro circo y teatro.
Ahora, pendiente de un invisible hilo
irrompible y duro como el acero
flexible como el bambú tras muchos años
vuelas sin fronteras ni muros
en los archivos de tus tiempos.
Toni Oliver
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