sábado, 28 de marzo de 2020

Abrí la cortina de la ventana

Abrí la cortina de la ventana

Abrí la cortina de la ventana
quería ver el sol tras las rejas
imaginarias, me encierran en casa.

En mi mente el caballo salvaje
galopando entre los prados
por el llano de montaña a montaña.

Esos abrazos que llegan al alma
esos besos que te desmontan
ese revoloteo de mariposas
las agujas del tiempo olvidarlas.

Encorvado en mi nido
tras las paredes como coraza
miro el volar de los pájaros
mientras estoy en la jaula.

Esas penetrantes miradas
saliendo las notas
de mi desencarnada guitarra
bajo la luz de la luna
llena y enamorada.

En las llaves telarañas
el olvido de la cerradura
las musarañas y su danza
en los ojos legañas.

En mis pensares
un café en una terraza
el mar azul con su playa
amigos y sus palabras
esos silencios que hablan
enciclopedias sin páginas.

Ante el espejo la fiera
parecía una oveja mansa
rugen las entrañas
uñas afiladas.

Ese tacto, calor humano
que a través de la piel
tu alma va calmando
mudas palabras
un silencio letrado.

Tras el prisma
el rojo de la pasión
desterrado en el tiempo
fundiendo las rejas
de ese forzado destierro.

Verdes las macetas
florecen las rosas
llegan las abejas
ante mi la puerta.

Tiempo ha, sonaban las olas
su vaivén rompiendo en la arena
su son, una orquesta
danzan las ballenas.

Por el ojo de la aguja
el humo deshilachado
entre las nubes desapareciendo
sopla el viento
cielo azul y despejado.

Explota el mundo
sus ideas caducadas
su avaricia desenfrenada
tras los escombros enterradas.

Juntos de la mano
todos a una vamos avanzando
los baches tapando
por el camino avanzando.

Desnudos bajo la lluvia
sin trajes ni coronas
sólo la piel como traje
el mismo que cuando llegamos
a este mundo asalvajado.

Calienta el sol sobre esa piel
el sudor se desliza
como las lágrimas por el rostro
la alegría en los labios
el brillo en los ojos
besos y abrazos
del corazón arrancados.

Toni Oliver

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