miércoles, 10 de julio de 2013

Perdido en el desierto de las emociones





Perdido en el desierto de las emociones

Perdido en el desierto
de humanos poblado
emociones andaba buscando
más todo estaba desolado.

En la oscura noche una cueva
tremolosas lucecitas en ella
mínimas luces que la estancia iluminaban
ese camino que a sus entrañas me llevaban.

En la penumbra un cuerpo me rozó
mi piel se estremeció
una corriente por todas mis carnes
todos los pelos erizados quedaron.

Musa de oscuro y rizado pelo
ni tu cara he notado
mas tu vida en la mía ha entrado
toda mi mente has nublado.

Por el ardiente desierto
mente nublada
por las nubes alejadas
buscando la ternura de la amada.

La caverna de las Musas ya alejada
Musas que en mi mente van grabadas
Musas que a mi vida han llegado
esas que mi mano están guiando.

Al oasis de mis pensares
ellas se han instalado
mi mundo guían filosofando
sal y pimienta a la vida me han dado.

De mi vida a veces se divorcian
más eso no importa
tan bellos lazos han creado
que en cualquier momento están a mi lado.

Pájaros de bellos colores
con todos ellos bien decorado
la belleza en ti se ha instalado
ante mis ojos, maravillado.

El fluir de la vida en tus agua llevas
la vida que tu sangre injerta
el sediento viajero te desea
su vida depende de ella.

Las ardientes arenas te esconden
al igual que a las musas de la caverna
esas que mi piel erizan

en el brillo de los ojos se refleja.


Toni Oliver

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