Saltaba la ranita

Saltaba la ranita

Saltaba la ranita encantada

de flor de loto en flor de loto

en su maravillosa charca

chula ella, mientras cantaba

de sus amigas acompañada

cantaba al alba el croar de la mañana

mientras el sol asomaba

éste con su calor les acariciaba.

Embriagada por el perfume

que cada flor le prestaba

nadaba de lado a lado, embrujada

saltaba, pero no afloraba

más bien amerizaba

entre las verdes aguas de la charca.

Se burlaban sus compañeras

que croando le cantaban

“estas son las mañanitas”

con la borrachera de la ranita

con sus croadas no se aclara

se le escapan las notas bajo el agua.

Casi se atraganta

con una mosca que pasaba

se le olvidó recoger la lengua

que le entraba hasta la garganta

ya no croaba, se atragantaba

no con la mosca, sino con la lengua liada

lo que lía una mosca en una charca...

Toni Oliver

Pintura de Tinuca Montes