El dolor interno
El dolor interno calla
mudo, taciturno
no cuenta su vida ni sus desgracias
no se regodea buscando consuelo.
Si ese dolor hablara
publicando por las esquinas
multiplicados por la rosa de los vientos
se esparciría como el aire
entrando por las ventanas de la mente
corroyendo los pensares
hasta los de la buena gente.
Saltan las fuerzas internas
al refuerzo pensante
levantando el ánimo
ausente antaño
subiendo la cima paso a paso.
Se inunda el pozo de agua
si no cunde el miedo
se flota hasta la salida
donde se empieza una nueva vida
visitados los infiernos
los de la vida misma.
¿Quien puede criticar
el dolor que otro siente
si del otro nada entiende
ni tampoco lo siente?
Palabras vanas
sobre males ajenos
propagadas por las ventanas
con propósitos inciertos...
Toni Oliver