miércoles, 27 de julio de 2022

Se ven volar

Se ven volar

Se ven volar esas semillas
de pelos suaves su paracaídas
viajando con el viento a cualquier lugar
no le importa donde caer si eso le da la vida.

Entre el blanco y el negro
imágenes de desesperación
hambre, sin ilusión
agrietado el suelo.

Sin fuerzas, te levantas del suelo
navegando, aunque sea por el desierto
por los mares si es preciso
el héroe tú y tu cerebro.

Un violín suena
hondo un respira 
las anclas se levantan
empieza la aventura.

La de vivir con ilusión
contracorriente luchando
si menester fuera tal hecho
las fuerzas, ya sin peso te van elevando.

Como esa semilla
que vuela con el viento
no le importa donde la irá posando
donde la deje, ahí sentará su reino.

Toni Oliver

Fiesta

Fiesta

Voy caminando con un amigo, por las calles, cerca de la playa, un avión de publicidad con un letrero en letras rojas que pone “FIESTA”, da vueltas, una tras otra, va a repostar y vuelve con su publicidad, hasta que al caer la noche, aprovechando la oscuridad, sigue con su trabajo, ahora con el letrero iluminado, me imagino que con leds, la vista es preciosa y muy llamativa.

Pasa el tiempo, seguimos caminando, observando de vez en cuando el recorrido de la avioneta, en un momento dado, se ve como se van descolocando las letras bajando hacia abajo, como si alguien estuviera de ellas colgado o agarrado a ellas, el letrero, sin letras, las luces apagadas, deja de verse, pero sí se ve la caída de un bulto pegado o agarrado a las letras, nos paramos, nos quedamos mirando como caía, cada vez se acerca más y más, hasta que un ensordecedor ruido se escucha justo al lado de mi. 

Mi amigo, aplastado por ese bulto, que es una persona, con las piernas rotas, una mano dislocada,  la otra personas a mis pies, también mal herida, mientras me acerco a ver como está, le pido a mi amigo, consciente él, que pida ayuda para los dos, el caído, inconsciente, pero respira. Nadie en toda la calle... 

Esperando la ambulancia, parecía escuchar las sirenas que se acercaban, intenté mirar por donde venían... En ese momento, al escucharse más fuerte el sonido, abrí los ojos, era el despertador que me estaba diciendo que era hora de levantarse...

Toni Oliver