Cansado de escribir
Cansado de escribir
a los cuatro vientos
y a los otros cuatro imperfectos
lo que veo y siento
sobre la arena en movimiento
en un inexistente desierto
donde la brisa ausente ha muerto
los ojos en el fondo de un pozo seco
en un oasis caduco
de inteligencia y cerebro.
Pastan los borregos
la hierba seca del no prado
sobre esa arena de cemento
donde cuando sale el sol
arden hasta los cimientos
asomando las mentiras de los cuerdos
embalsamadas para su adoración
por los tiempos de los tiempos
esos inexistentes inventados por los humanos
para esclavizar a sus hermanos.
Aniquilaron el amor
de la auténtica felicidad olvidado
alimentando el cerebro
de esa falsa felicidad que se compra con dinero
lo mismo que el amor de mercado
a cada segundo subastado
con voces armónicas sin son
como un cincel silente que va grabando
la falsedad de ese mundo
en un herido corazón.
Toni Oliver