Botemos nuestro velero a la mar

Botemos nuestro velero a la mar

Botemos nuestro velero a la mar

izemos las velas al viento

empecemos la aventura

la de vivir en todo momento.

Naveguemos por los mares

con sus calmas y tempestades

momentos con paz y tranquilidad

otros de tormentas y males.

Nunca acaba la lucha

con las calmas y tempestades

sentir la mar salada en la cara

su sal curte nuestra alma.

Casi desfallecidos a veces

otros momentos de calma

siempre la vida avanza

vivir es lo que trae.

Amurando la proa en las tormentas

momentos de ingravidez

momentos de gran pesadez

pero siempre avanzando.

Por dura que sea la tormenta

nunca la lucha cesa

es la aventura de la vida

la que se siente en cada ola y sus crestas.

Hacia los cielos subes

costando en la remontada

bajo tus pies pierdes la mar salada.

Al vacío caes en la bajada

volando sin gravedad

montañas de agua por todos lados

perdido en medio de ningún lado.

Dura es la lucha

dura es la mar

dura es la vida

duro es madurar.

Cada tormenta es una escuela

se aprenden lecciones no escritas

pero se graban en la piel

y duran toda la vida.

Después de la tormenta

la calma vuelve en escena

recuperando las fuerzas

reparando las heridas

en el barco y en la vida.

Sigue el velero su camino

surcando indómitos mares

disfrutando la vida

con todos sus avatares.

Toni Oliver