Buscaba la dama

Buscaba la dama

Buscaba la dama
andando con su caballo de fuego
ese amor de pasión ardiente
más allá de las montañas
más allá de las corrientes.

Cabalgaba por las llanuras
incendiando todo con sus pasos
tal era la pasión que en ella ardía
que las cenizas eran su rastro.

Ardiente frescura
fuego incontrolado
cegante belleza
todo arde a su paso.

Un caballero ardiente
más allá de los mares
lo mismo que ella buscaba
sus ardientes pasos ellos vislumbraban
el charco salado sus pasos apagaban.

El por un lado
la dama por el otro
las aguas saladas cruzaban
encontrarse en el centro deseaban.

El frío de las aguas
las llamas apagaban
mas al encontrarse
ardieron las aguas
dejando paso a la ardiente cabalgata.

Algo más que ardores
en sus corazones pasaba
impacientes y palpitantes
ni por un segundo paraban.

Esos corazones más fuerte latían
acompasando sus ritmos acelerados
poco a poco fueron hallando
que algo extraño en ellos pasaba.

El delfín que por ahí pasaba
de mirarlos no paraba
hasta que al verlo
le preguntaron que miraba.

Dos corazones ardientes
que de tanto fuego no saben
que enamorados van andando
pensando que sólo su fuego
el ardiente fuego les juntaba.

Sorprendidos quedaron
a los ojos se miraron
sus ardientes labios se besaron
con sus brazos siguieron abrazados
cabalgando por todos lados.

Toni Oliver