Se enfurecieron los dioses
Se enfurecieron los dioses
por arrebatarles a su hija
que vino conmigo en su huida
más allende los mares.
Enfurecidos y embravecidos
lanzaron sus tormentas y rayos
removiendo las aguas desde sus entrañas
mas no consiguieron hundir mi barco.
Se olvidaron que llevo savia de diablo
barco hermético de madera indestructible
sus rayos me atravesaron
de mi sangre, hilo para coser las velas.
No me importa su furia
batallaremos en mis cavernas
donde el fuego arde impaciente
poco le importan las deidades.
Sus llamas imponentes
en la oscuridad eterna
ni sus rayos penetran
en las entrañas de la tierra.
De vez en cuando los veo
con sus ojos encendidos
ella y yo mirando
como se hunden en su odio y orgullo.
Se consumen en su propia furia
semi dioses, semi humanos
no encajan en ningún lado
ni en el universo, ni en las entrañas del infierno.
Mientras... En este averno
reinan los sentimientos
que salen del alma y del corazón
aunque parezca una sinrazón....
Toni Oliver
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