¿Que tienes tú, pequeña cala
que en cuanto te abandonan las masas
ofreces tanta calma
que en el alma y corazón cala?
Te miran los ojos
se olvidan los pesares
el reloj, las prisas
desconectas del universo
tan simple como un verso.
Se paraliza el cuerpo
el corazón pausadamente late
corre la sangre por las venas
como el río de aguas mansas
llenando de energía
cual caída de gran catarata.
Paras el reloj
el mismísimo universo
ante los ojos las aguas claras
ni la brisa rompe la calma
sólo el suave latir del corazón
el sonido del aire al respirar
forman la orquesta
música celestial...
Toni Oliver
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