Me asomé al balcón
Me asomé al balcón
ardía la brisa
ardía la barandilla
las plantas “espachurrías”
en el horizonte bruma
en mi cuerpo el sudor corría
mientras las cejas se achicharraban
el pelo no, porque de él carecía
el sol ni asomaba
la humedad subía
mi cuerpo se cocía
a fuego lento, como Dios manda.
Pensaba dar una vuelta
y me la he dado cerrando la puerta
no sea que ardan hasta las ideas
voy al frigorífico a por agua fresca
a ver si se enfría mi garganta
por ahora carraspea
por el aire que la acaricia
como si una soga le hiciera la fiesta...
Los pájaros bajan en picado como una avioneta
“achuchurrios” entre las invisibles llamas
hasta las vista se les nubla
aterrizan, como en la película
“aterriza como puedas”
sobre los coches, de aguafiestas
sobre los blancos “fiesta negra”
sobre los negros “blanca fiesta”...
Un sorbo, que alegría
esa agua fresca por la garganta
témpanos de hielo la acarician
un masaje para la calma
los poros se sueltan
como fuentes de agua salada
mojando todo lo que tocan
pidiendo más agua fresca.
Toni Oliver
No hay comentarios:
Publicar un comentario