Mirada felina
Mirada felina
gata salvaje
en la selva encarnada
sentidos depravados
colmillos afilados
uñas como garras
conquistando el alma
antes que la carne.
Sienten las presas
esa mirada de entre las ramas
de ningún sitio, de todos lados
esos ojos van penetrando
mientras se escuchan los silentes pasos
retumbando entre la hojarasca
de nuestras mentes perturbadas
infernal terremoto.
Fuego, el rojo de ese pelo
ardiente, flamas del infierno
incombustibles leños
alimentando el ardor de los pensamientos
mientras, la piel ardiendo
entre las flamas el chisporroteo
aliento entrecortado
incontinente corazón.
Entre la oscuridad
dos árboles, como columnas
ni Hércules con ellas pudo
viendo su inmensidad
allá en lo alto, un bello arco
nacimiento de mundos
la imaginación, la realidad
los sueños, la ilusión...
Toni Oliver
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