Siguen mis piernas andando

Siguen mis piernas andando

Siguen mis piernas andando

en el lento caminar los caminos

ya sin rumbo, no importa el destino

mientras disfrute de lo que ando.

Tu sonrisa estoy viendo

cada vez que conmigo te estás cruzando

a veces hasta pienso

si esa sonrisa en mi vas impregnando.

Quizás sea la necesidad de un joven aliento

de un viejo corazón ya dolorido

de los avatares del tiempo con sus pasos

aunque importa poco mientras me sienta vivo.

A veces me gustaría sentirme contagiado

de esa sonrisa que, lo reconozco, 

a veces voy perdiendo

aunque sea por poco tiempo, 

luego la recupero

en mis andares cara al viento.

Pero sabes una cosa, te lo cuento

cuando te cruzas se recupera mi cuerpo

las llagas se van curando

aunque luego desaparezcas con el tiempo.

Pequeños momentos

indescriptibles, pero bellos

no los veía de joven cuando iba corriendo

sin destino ni rumbo

sólo por la inercia del momento

y de las corrientes que te van arrastrando.

Ahora, con más calma, viendo el pasado de lejos

mis lentos pasos, incluso pensamientos

piden calma para mi mente y cuerpo

sin prisas ante un futuro incierto

si bien el final destino es claro y cierto.

Toni Oliver