Blanco de nieve

Blanco de nieve

Blanco de nieve

manchado de sombras

decorado de azul cielo

bajo el sol su brillo

la piel tiritando de frío.

Cabeza de elefante en la cumbre

como en los tiempos de Atila

atravesando las cordilleras

heladas de la fría Suiza

ejército de héroes.

En sus laderas

la voz del almirante

dando órdenes a sus marineros

escuchando con cara de becerro

sus absurdos vocablos inciertos.

Manada de leones

abandonando el ardiente desierto

pisando sobre las frías nieves

del hambre y calor a lo desconocido

con sus cachorros y sus pies doloridos.

Avisan las nieves

cuarteadas por los tiempos

silencios rotos por ruidos

cuidado a los inexpertos

en cualquier momento me desprendo. 

Sopla el viento

cortando la cara como un cuchillo

afilado con mucho tiento

infiltrándose por el cuerpo

dando ritmo al tiriteo. 

A su paso por los carámbanos

pone música al tiempo

extraña en lo desconocido

quizás aúllan los lobos

o, quien sabe, un sueño.

Toni Oliver