A ti que vives en las alturas

A ti que vives en las alturas

A ti que vives en las alturas
te crees el dueño de la tierra
dueño de la muerte y vida
importándote lo último una mierda.

A ti que te crees el dios
sin que te quede corazón
ni alma ni perdón
baja un día a la tierra.

Revuélvete en las basuras
bajo el sol asfixiante
sobre la ardiente arena
pies descalzos
por no tener con que calzarse.

A ti que quieres privatizar el agua
para engrosar tus arcas
recuerda como el sol achicharra
también esa sed incalmable
esos cuerpos ya sin agua
a los que quieres cobrarle.

A ti, el que tienes tanto dinero
que conviertes el mundo en un estiercolero
sólo por el mero hecho
de haber nacido en un fino lecho
creyéndote el dios de los cielos.

No olvides que el pueblo
ese que pisoteas sin miedo
ese que aplastas contra el suelo
quizás se levante con sus compañeros
y se cojan su derecho.

Derecho a vivir con la espalda bien alta
erguida la cabeza, vista al frente la mirada
caiga quien caiga,
la humillación hay que desterrarla
y parar la sangre derramada
para que jamás vuelva
a correr por la calle como agua.

Toni Oliver