Veo en el
fuego
Veo en el fuego de la ardiente cera
muchos recuerdos de cuando estuve a tu
vera
sonrisas, alegrías, glorias
también penas, menos penas con tus
palabras
a veces tus brazos me levantaban
de muchas caídas por no hacer caso de
tus palabras.
Sigue ardiendo la cera roja
como la sangre de las heridas
sí, aquellas que curabas con saliva
otras con una sonrisa.
Parpadean las llamas
tal como parpadea la vida
lo mismo que llega
en cualquier momento te la quita.
Toni Oliver
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