Pensamientos filosóficos a cualquier hora del día o de la noche. 11/01/2017
Cuando hables con un niño, mírale directamente a la cara y haz que el también mire a la tuya, no chilles, habla normal. De esta forma aprenderá a saber cuando le mienten y, de paso, a decir la verdad si es el ejemplo que le das.
Con los adultos lo mismo. Sólo que será algo más difícil que aprenda a decir la verdad y seguirá creyendo que te crees sus mentiras.
La ventaja, tu sabrás que te miente, el no sabrá que tu lo sabes.
Toni Oliver
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