Los barones y la baronía
Los barones y la baronía
viven del cuento cada día
del pueblo la sangre chupan
pero dicen que a la gente dan comida.
Los barones como sanguijuelas
de las aguas podridas se aprovechan
pudren todo lo que tocan
les encantan las aguas revueltas.
Por el bien del pueblo dicen
pero le traicionan a la vuelta
en toda la cara le escupen
culpando por su presencia.
Sale un rebelde titiritero
como espadachín planta cara
pero tiene la cara salivada
la cabeza abierta a pedradas.
Se sigue rebelando
sin armas se está quedando
la de la convicción sin uso a gastado
la del orgullo le ha comido por todos lados.
Los barones y la baronía
pisan y pisan cada día
esas trabajadoras hormigas
que les sustentan cada día.
Miles de cadáveres a su paso
sin sentimientos ni compasión
hundiendo y pisoteando
no quieren perder su sillón...
Se rebelarán un día
todas esas hormigas
carcomerán esas sillas.
Se hundirán con el batacazo
en los lodos de su fracaso
arenas movedizas por todos lados
quién esos desperdicios quiera salvar
en lodos malolientes tornará.
Toni Oliver
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