Pensativa estaba la niña
Pensativa estaba la niña
mirando al infinito
de su boca ni palabra salía
su mano la cabeza sostenía.
Viajando en la mente de la nada
de los pensares y anhelos
de los enfados y berrinchelos
entre el amor y el odio eligiendo.
Sigue la niña
con la mirada infinita
atravesando cuerpos y paredes
buscando la sonrisa que no aparece.
Pasa la mosca volando
se desvía la mirada
se posa la mosca en la calva
del calvo que está al lado.
Se vislumbra una sonrisa
en los labios de la niña
se cae la mano que aguanta la cara
con la mano intenta atraparla.
Roza la mano la calva
del calvorota vecino
alza la mosca el vuelo
la risa alcanza calvo y niña.
Toni Oliver
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